Fisioterapia Cefaleas tensionales

La cefalea tensional es la más frecuente de todas la cefaleas. Dentro del grupo de cefaleas, la más frecuente es la cefalea tensional que se corresponde al 80% de los casos, frente al 16% de las migrañas. Aunque en ocasiones  se usa el término migraña de manera incorrecta, para referirse al dolor de cabeza. Podríamos clasificarlo en dos grupos:
 
Cefalea tensional episódica:  cunado se produce menos de 15 días al mes, que afecta al 70% del grupo
 
Cefalea tensional crónica: Afecta más de 15 días al mes, que afecta entre 1-3%. El principal origen es el aumento de tensión en el sistema muscular y fascial  de la región cráneo cervical. La palpación de esta musculatura suele ser doloroso, y provoca el dolor de cabeza de los pacientes.

Las cefaleas tensionales son uno de los tipos más comunes de dolores de cabeza, y pueden ser debilitantes e interferir con la calidad de vida. Estas cefaleas suelen estar relacionadas con la tensión muscular y el estrés.

 

Dentro de las causas más comunes podemos encontrar:

 

  1. Tensión muscular: La tensión en los músculos del cuello, los hombros y la mandíbula puede contribuir al desarrollo de las cefaleas tensionales.
  2. Estrés emocional: El estrés, la ansiedad y la tensión emocional pueden desencadenar o exacerbar las cefaleas tensionales.

 

Los síntomas comunes de las cefaleas tensionales incluyen:

 

  1. Dolor en ambos lados de la cabeza: Las cefaleas tensionales suelen afectar ambos lados de la cabeza y se describen como una sensación de presión o apretamiento.
  2. Dolor de intensidad leve a moderada: Aunque las cefaleas tensionales no suelen ser debilitantes, pueden causar molestias significativas y afectar la capacidad de concentración y realizar actividades diarias.

 

Con la fisioterapia se pueden aliviar los síntomas que produce esa cefalea, usando diferentes técnicas. 

 

  1. Terapia manual: Mediante técnicas de terapia manual, como el masaje terapéutico, la liberación miofascial y la movilización articular, buscamos aliviar la tensión muscular y promover la relajación.
  2. Ejercicios de fortalecimiento y estiramiento: mediante programas de ejercicios específicos para fortalecer los músculos debilitados y estirar los músculos tensos, mejorando así la postura y reduciendo la tensión muscular.
  3. Técnicas de relajación: como la respiración profunda, la relajación progresiva y la meditación, para ayudar a reducir el estrés y la tensión emocional asociados con las cefaleas tensionales.
  4. Reeducación: Mediante modificaciones de conducta, la higiene postural y las estrategias de afrontamiento para minimizar los desencadenantes y prevenir la recurrencia de las cefaleas tensionales.